Mientras el trámite judicial iniciado de oficio por la pirotecnia en el Superclásico continúa, el Tribunal
de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) analiza la
posibilidad de castigar a Boca con un partido a puertas cerradas, que sería el próximo ante Colón de Santa Fe.
Incluso,
si la Justicia decide clausurar La Bombonera por una fecha, esa sanción
también se aplicaría en el estadio donde Boca reciba al conjunto
santafesino.
Mientras tanto, el fiscal porteño Martín López
Zavaleta levantó la clausura preventiva sobre la primera y segunda
bandejas norte del estadio Alberto J. Armando, luego de considerar que terminó con los peritajes necesarios.
Durante
dos allanamientos que la Justicia de la Ciudad de Buenos Aires realizó
el domingo y el lunes por la noche se secuestraron más de un centenar de
cartuchos de pirotecnia además de "un arsenal" sin utilizar que se
encontraba escondido en el baño.
López Zavaleta imputó a Boca
por omisión de recaudos de seguridad de evento deportivo, y como
considera que la pirotecnia estaba en La Bombonera desde el día anterior
al Superclásico, citaría próximamente a algunos dirigentes, según
detallaron fuentes judiciales a Noticias Argentinas.
Del otro
lado, Boca se mostró enojado y contrariado por las acusaciones de la
Justicia porteña, ya que según denunciaron durante el allanamiento que
se realizó el lunes por la noche en La Bombonera fue la Policía la que
"plantó" las bengalas sin utilizar que complicaron la situación
judicial.
Carlos Stornelli, exfiscal y exministro de
Seguridad bonaerense, actualmente cargo de la seguridad de Boca, aseguró
que el club "hizo todo para aportar la mayor seguridad posible".
"Contratamos
un 50 por ciento más de personal privado que para cualquier otro
partido. Y las fuerzas de seguridad también se multiplicaron en cantidad
y también en cacheos. Por eso es muy raro lo que pasó", afirmó.
Stornelli afirmó que su "sensación es
que todo lo entraron del entretiempo para delante", lo que eximiría de
responsabilidad a los dirigentes y responsabilizaría a los cacheos de la
Policía Federal y la seguridad privada.
"Si lo hubieran hecho
antes, todo habría sido utilizado en el primer tiempo. Pero esta es una
conjetura mía, apenas eso. Nosotros, Boca, no manejamos el operativo de
la calle. Todo resulta muy llamativo. Es alguien que quiere hacer daño. Y
si no lo quiere hacer y sólo quería cargar a River, es un acto muy
irresponsable porque el único lastimado es el club", opinó.