Hubo 3 polémicos cantos de la barra brava Xeneize para con Ricargo Flaco Gareca en 1984. En medio de la huelga de jugadores, comandada por Oscar Ruggeri, el club en crisis y un futuro incierto:
1Gareca tiene cáncer, se tiene que morir.
2 Siga siga siga el baile al compás del tamboril, que Gareca tiene cáncer y se tiene que morir.
3 Aplaudan, aplaudan no dejen de aplaudir, Gareca tiene cáncer, se tiene que morir.
Ocurre un hecho increible en Estados Unidos, al no tener más suplentes, el Loco Gatti debe ingresar como jugador de campo, reemplazando al lesionado Berta.
Dino Sani dijo: anoche jugamos en Niza, dormimos, nos levantamos para almorzar y con el último bocado en la boca subimos al micro para venir hasta Turín. Cinco horas de viaje. Llegamos al hotel con el tiempo justo para instalarnos y salir para la cancha. ¿Así quién puede jugar? Nadie.
Jugado en el estadio Olímpico de Atenas en el partido despedida a Dimitris Domazos, catalogado por los medios como el mejor jugador de fútbol que Grecia dio en toda su historia
Boca Juniors debió utilizar una camiseta suplente con los números pintados a mano, que con el correr del partido se fueron haciendo borrosos. La mala situación económica del club daba para todo.